Un personal que hace la diferencia

El hotel está limpio y bien cuidado, y la atención del personal es excepcional. La piscina es un lugar perfecto para relajarse y disfrutar del ambiente.

Sin embargo, el acceso a las habitaciones puede ser un poco engorroso, ya que es necesario recorrer distancias largas por el hotel.

El desayuno era variado y siempre había opciones

frescas. La atención del personal fue sobresaliente, siempre atentos y dispuestos a ayudar. Sin embargo, el ruido de la música en vivo durante la noche puede no ser el ideal para quienes buscan descansar.

Playa no ideal, habitaciones amplias y buffet variado y delicioso! !

abundante buffet, amplias habitaciones, playa sucia.

El personal de limpieza es excepcionalmente amable.

La ubicación es perfecta, pero no hay aparcamiento en el hotel.

Las habitaciones son cómodas y sencillas, equipadas con todos los servicios necesarios. La piscina es un lugar agradable y tranquilo para relajarse, con un ambiente perfecto para quienes buscan tranquilidad.

El hotel tiene algunas restricciones incómodas, como la obligación de llevar pantalón largo para cenar, lo cual puede ser un gran inconveniente en pleno calor. Además, el acceso a las habitaciones es un poco engorroso, ya que hay que recorrer bastante espacio por el hotel, lo que puede resultar agotador tras un día de playa. Las instalaciones aunque bien, se sienten algo anticuadas y el desayuno no es tan destacado, a pesar de su variedad.

La habitación era amplia y cómoda, con un balcón que tenía vistas a la piscina. Todo estaba muy limpio, y tenía toallas de aroma que sumaban un toque agradable. El baño también estaba bien equipado con albornoces. Definitivamente un lugar para relajarse después de un día de playa. Aunque el acceso a las habitaciones puede ser un poco engorroso, la comodidad de la cama lo hacía olvidable.

La habitación era espaciosa, con un balcón disfrutando de una vista increíble al área de la piscina. El buffet de desayuno estaba increíblemente variado, con opciones como crepes elaboradas al momento y un panal de miel. También, el detalle de ofrecernos una botella de cava al llegar fue muy agradable.

No se puede cenar en pantalón corto.

Vaya sorpresa! Un hotel que exige pantalones largos para la cena, ¡qué retroceso! Además, el personal, aunque amable, no tenía ni idea de cómo manejar una simple queja. Casi me decidía a escribir una buena crítica, pero la falta de atención me lo impidió. La verdad es que las instalaciones son anticuadas y se nota mucho.

Ubicación muy padre, justo al lado de la playa. Habitaciones amplias y súper limpias, siempre con un detallito de bienvenida. El personal, bien atento y servicial, te hacen sentir como en casa. Ideal para descansar y disfrutar del mar.

la atención del personal es excepcional y siempre están sonriendo. el acceso a la piscina podría ser engorroso.